El intestino y el cerebro trabajan en equipo influyéndose
recíprocamente.
Es la razón de por qué nuestra salud mental, visual, está
relacionada la salud intestinal y viceversa.
El estrés es un agente contraproducente
principal de la insuficiencia de una flora intestinal equilibrada.
La raíz de muchos problemas de salud está relacionada con un
desequilibrio de las bacterias intestinales, sin embargo la mayoría de la
gente, incluyendo muchos médicos, no se dan cuenta que el 80 por ciento de su
sistema inmunológico se encuentra en su tracto digestivo, por lo que un
intestino sano un punto focal importante si desea nuestro lograr salud
equilibrada.
Para ello por un lado hay que tomarse completamente en serio
todas las acciones necesarias para reducir y disolver el estrés y alimentarse
de manera que mantengamos una flora intestinal óptima.
Hoy en día el consumo de alimentos procesados ha
alterado la dieta humana.
El resultado es que estamos cosechando los resultados en forma
de rápido aumento de los problemas de salud
crónicos.
Los alimentos fermentados son también algunos de los mejores
agentes de desintoxicación disponibles, lo que significa que pueden ayudar a
liberar el cuerpo de una amplia variedad de toxinas, incluyendo metales pesados.
La mejor manera de
asegurar una flora intestinal óptima es consumir regularmente alimentos
fermentados tradicionalmente y dedicar nuestra atención activa en la disolución
del estrés.
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